Biólogos, técnicos y pescadores realizan un importante estudio sobre los Dorados

30 junio 2018

Prensa CARU conversó con el Biólogo sanducero Marcelo Crossa, con  25 años de investigación pesquera y recursos ictícolas. Pertenece a la entidad ACQUA (AGUA), una institución que tiene la preocupación por la calidad del agua y  de los recursos naturales que en ella existen.

“Hace dos meses que se viene trabajando en la telemetría de los dorados en las aguas del río Uruguay, aguas abajo de la Represa de Salto Grande, en el proyecto de CARU.  La telemetría es básicamente un instrumento que tenemos para obtener  la información en forma remota en este caso de los dorados. Colocamos un radiotransmisor o un  trasmisor radioacústico en el pez, y la información que se trasmite es captada por una antena que está fuera del agua, en bases ubicadas en zona elevada de  la costa, unos diez  o doce metros de altura, y esa información es registrada y luego analizada por nosotros”, comentó Crossa.

Agregó  “que cada pez que pasa por el lugar anunciado está generando una información que puede ser  sólo de presencia  o ausencia, o de temperatura del agua y la profundidad de donde se está desplazando. En caso que el pez no esté ubicado en la zona de la base fija, nosotros los monitoreamos a través del monitoreo móvil, ya sea en una embarcación o buque. Esto apunta a mejorar el conocimiento sobre el recurso dorado y la hipótesis que nosotros empezamos a trabajar que se da ante la imposibilidad de las especies ya sea del dorado o de otras, en subir la represa de Salto Grande. Podrían estar buscando otras alternativas para desplazarse que con la “telemetría” vamos a sacar muy buena información sobre lo que pasa en el día a día de los peces”.

Sobre las conclusiones que se ha arribado en casi dos meses de trabajo, Crossa dijo “que la colocación de las antenas es muy importante. Ya están ubicadas en las zonas de la Represa de Salto Grande, en el río Daymán y aguas arriba del río Queguay, en un futuro  cerca de Arroyo Negro, bases estratégicas que nos brindan una mejor información sobre el tiempo que los peces permanecen en esos transeptos”.

Por otro lado destacó  “la buena calidad de las bases y el mantenimiento que se ha podido hacer con la colaboración de la gente para su cuidado. No ha habido felizmente que lamentar hechos de vandalismo. Los pescadores, tanto deportivos como artesanales, se han sumado a la tarea  y se ha creado una red social que está funcionando muy bien. Ya nos comunicaron que hubo tres devoluciones de dorados y además nos garantizan la información con los videos que grabaron”.

A manera de conclusión Crossa expresó “estamos generando una nueva forma de investigación, más participativa, más integrada al territorio, que le dará mucho fruto a este proyecto de CARU que recién comienza y tiene para 27 meses”.

 

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